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Dicen que la primavera la sangre altera y lo cierto es que si eres una de esas personas que miden el tiempo en viajes, sí que a estas alturas del año notas cómo la sangre te hierve en las venas pidiendo una nueva aventura. Esto solo tiene una explicación: ha llegado el momento de organizar la siguiente escapada. Si no estás del todo convencido porque piensas que ya queda poco para el verano y prefieres esperar para hacer las maletas, te contamos cinco motivos por los que no querrás quedarte en casa esta primavera:
1. No es temporada alta. Viajar en verano está muy bien pero evitar la temporada alta ¡es mucho mejor! Imagina unas vacaciones con menos aglomeraciones, precios más asequibles y mejor movilidad en el destino para poder disfrutar a tu aire. El bolsillo y el karma agradecen los viajes en los que es posible llevar un ritmo relajado y saborear los encantos del destino elegido sin sobresaltos, ni grandes filas.
2. La temperatura. Es cierto que en esta época del año la meteorología suele ser más inestable, pero las variaciones de temperatura se mueven entre máximas y mínimas más agradables que en invierno o verano. Por eso, viajar en primavera es muy cómodo siempre que uno use capas: si sale el sol se quitan capas y si se esconde, se vuelven a poner encima. No es necesario llevar un abrigo gordo de los que no sabes dónde meter cuando entras a un recinto cerrado, ni ir buscando una sombra para no morir achicharrado durante las visitas guiadas en el exterior.
3. La luz. Empieza la época en la que los días alargan y se pueden disfrutar de más horas de luz. Esto significa que tienes más tiempo para pasear y disfrutar de los colores de tu destino.
4. Naturaleza. No solo la luz, en esta época del año los colores toman las calles. Es cierto que el invierno y el otoño tiene su encanto, pero viajar en primavera significa conocer países en todo su esplendor, con toda su vida natural en su mayor apogeo. Las fotografías quedan increíbles, la luz hace que los colores naturales aún sean más vividos y la única desventaja es que seas alérgico y todo esto solo signifique una cosa: agravar tu malestar.
5. Alojamiento. Los viajeros que eligen la primavera tienen más opciones de alojamiento, debido a que hay menos gente viajando, y además a mejor precio porque no es temporada alta.
Si todavía tienes dudas piensa bien dónde quieres porque hay destinos turísticos que solo se pueden disfrutar en primavera, así que no le des más vueltas y empieza a preparar las maletas. Esta Semana Santa aprovecha para viajar.
