Subirse a un avión y sobrevolar ciudades, contemplar la inmensidad del cielo, sobrevolar las nubes o aterrizar en una pista sobre el mar son algunas de las sensaciones que el viajero experimenta al despegar o aterrizar en alguno de los aeropuertos más atractivos y espectaculares del mundo. Un ejemplo de ello es el Aeropuerto Internacional Princesa Juliana, en la parte neerlandesa de la isla de San Martín. Su atractivo se debe a que los aviones vuelan a escasos 25 metros sobre una de las playas más populares de la isla caribeña. Los jets privados y aviones comerciales aterrizan y despegan justo sobre las cabezas de los bañistas que casi pueden tocar el tren de aterrizaje. La pista de aterrizaje de Phinda, Kwazulu Natal en Sudáfrica es la única del mundo donde se debe comprobar antes de tomar tierra si la pista está despejada de leones o elefantes. Este hecho resumen la espectacularidad de la zona y el porqué ha sido votada en sexto lugar. El Aeropuerto de Mustique (MQS), San Vicente y las Granadinas está situado en el país isleño y al norte de Venezuela y de la isla de Granada, en la cadena de las Antillas Menores del mar Caribe. Rodeado de colinas verdes, la corta pista hace que los pilotos tengan que salir a gran velocidad para evitar terminar en el mar lo que le convierte en uno de los aeropuertos más «emocionantes» del mundo y solo apto para aviones de hélice. El Aeropuerto de Barra, situado en la ancha bahía de Traigh Mhor, en la punta norte de la isla de Barra, forma parte de las Hébridas Exteriores (Escocia) y es el único aeropuerto del mundo donde sus operaciones se realizan sobre la superficie de una playa. El aeropuerto tiene tres pistas marcadas por postes de madera sobre la arena que, con la marea alta, quedan bajo el agua. El Aeropuerto de Barra es un destino popular para los vuelos charter privados aunque las pistas de arena solo permiten aterrizar o despegar a los aviones de hélice pequeños. El Aeropuerto Internacional de Paro está rodeado por las montañas del Himalaya, en el valle de Paro Chhu, y es el único aeropuerto internacional de Bután. Situado a 2.235 metros, en un amplio valle junto al curso del río Paro, es considerado «uno de los aeropuertos más complicados del mundo». A los pies de la cordillera del Himalaya, rodeado de cumbres montañosas, glaciares, lagos, ríos y arroyos, se encuentra Sikkim, un pequeño estado de la India famoso por tener la tercera cumbre más alta del planeta, el pico Kanchenjunga (8.598 metros), y ahora también por el extraordinario aeropuerto de Pakyong, inaugurado en septiembre tras nueve años de trabajos en los que se han invertido más de 58 millones de euros. Construido en la cima de una colina, a unos dos kilómetros por encima de la aldea Pakyong -a 1.371 metros sobre el nivel del mar-, el aeropuerto cuenta con lo que muchos consideran una de las pista más asombrosas del planeta. Con una longitud de 1,75 km y 30 metros de ancho, el pasajero que recorre la calle de rodaje de 116 metros de largo tendrá la auténtica sensación de saltar al vacío.