Los géiseres no son un fenómeno corriente, y quizá por eso atraen tanto a los turistas. Hay unos mil en el mundo, por ejemplo en Islandia. De hecho, el famoso Geysir de Islandia es el que ha dado el nombre común de géiser a estas fuentes termales. Y por, supuesto, en el Parque nacional de Yellowstone (Estados Unidos). Surgen cuando el magma calienta los gases y el agua bajo la superficie, provocando chorros de agua y vapor. El agua calentada geotérmicamente regresa a la superficie -debido a las diferencias de densidad- a través de rocas porosas y fracturadas. Monedas arrojadas al exterior por el Ear Spring – Yellowstone National Park Pues bien, uno de los géiseres menos activos de Yellowstone, llamado Ear Spring, cobró vida repentinamente el 15 de septiembre. Había turistas en la zona, como casi siempre, que asistieron al espéctaculo. El agua ascendió a unos nueve metros de altura. Primero, vivieron el momento con emoción, y luego quizá atónitos cuando comprobaron que el géiser también arrojaba basura generada por el hombre. Entre los artículos descubiertos se encontraban cien monedas, un bloque de cemento, latas de aluminio, una pajita para beber, vasos de plástico, colillas de cigarrillos, carteles de metal viejos y un chupete para bebés de la década de 1930. Las autoridades del parque se han apresurado a pedir a los visitantes que no arrojen en estos pozos: «Los objetos extraños pueden dañar las fuentes termales y los géiseres», explicaron en el Facebook de Yellowstone National Park. Turistas en el géiser Steamboat, el 17 de septiembre – Yellowstone National Park
Ear Spring tiene un cierto parecido con la forma de una oreja humana, y es solo una de las docenas de fuentes termales, géiseres y fumarolas que pueden verse en esta zona de Yellowstone. El géiser más famoso del parque y el más activo del mundo es Old Faithful, que expulsa agua cada hora durante un periodo de 5 minutos y alcanza alturas entre 55 y 75 metros. El agua fría de la superficie es presionada desde abajo por el agua caliente, como en una olla a presión. Ear Spring ha entrado en erupción solo cuatro veces en los últimos 60 años, la última vez en 2004. Se dice que la erupción de septiembre -con el agua a 93 grados- fue la más fuerte desde 1957.