Hace ya más de quince años que celebró su primer congreso en Valdepeñas y la Asociación de Museos del Vino de España cuenta hoy con más de treinta miembros. Desde Cambados (Pontevedra) a Huétor Vega (Granada), desde Palafrugell (Gerona) a San Bartolomé (Lanzarote), por toda la geografía española pueden encontrar un museo o un centro temático dedicado al vino. El fin de esta asociación «es favorecer el encuentro, cooperación y estudio de los museos y centros temáticos del vino asociados, para la promoción, difusión y defensa de los intereses y actividades comunes, así como promocionar y difundir la cultura del vino en general y la de cada zona vitivinícola en particular». Entre sus asociados podemos encontrar algunas de las grandes bodegas de España, ya sea por volumen, por calidad o ambas. También, sin conexión directa con bodegas, centros situados en municipios de gran tradición vinícola. Dinastía Vivanco, en Briones (La Rioja), es la referencia número uno de este tipo de centros en España. El Museo Vivanco de la Cultura del Vino tiene cinco salas de exposición permanente, una temporal, un espacio de cuatro mil metros cuadrados y un recinto con más de doscientas variedades de vid. Supone una de las expresiones del arte vinícola más importantes del mundo. Pagos del Rey, en Morales de Toro (Zamora), cuenta con bodegas en algunas de las Denominaciones de Origen más reconocidas de España, como Ribera del Duero, Rioja y Rueda, y forma parte del grupo Félix Solís. Pagos del Rey Museo del Vino muestra «diversas manifestaciones culturales de la viticultura y la elaboración del vino desde sus orígenes hasta nuestros días». Barbadillo, en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz); El Grifo, en San Bartolomé (Lanzarote); Emina, en Valbuena de Duero (Valladolid), y López Heredia, en Haro (La Rioja) son otras referencias tanto en bodega como por sus museos. Además, dentro de esta asociación de museos del vino hay miembros que tienen sus sedes en algunos de los grandes municipios vinícolas de España. Es una apuesta evidente por mantener la cultura vitivinícola y ejemplos tenemos en Aranda de Duero (Burgos), Cambados (Pontevedra), Requena (Valencia) y Valdepeñas (Ciudad Real). Y a través de la cultura también se fomenta el enoturismo, cada vez con mayores adeptos.