kmedy.com
- La provincia de Barcelona es un territorio rico y diverso entre el Pirineo y el Mediterráneo, con más de 100 kilómetros de costa.
- Buenos ejemplos son los Gorg Negre y del Salt, el Delta del Llobregat, el Camino de Calella a Sant Pol de Mar o Pedraforca y La Mola.
Si decimos Barcelona parece que sólo vemos la emblemática Ciudad Condal, tan visitada hoy en día por turistas de todo el mundo. Pero la provincia de Barcelona es mucho más. Es un territorio rico y diverso entre el Pirineo y el Mediterráneo, con más de 100 kilómetros de costa y patrimonio natural. Hay mucho que ver. Estos cinco planes son sólo cinco buenos ejemplos.
Pedraforca
Si de montañas emblemáticas se trata, hay que hablar de Pedraforca, el pico más alto de Barcelona, con 2.506 metros. Lo que lo hace atractivo no es tanto la altura sino su peculiar forma, con los dos picachos y la enforcadura. Además, no forma parte de ninguna cordillera, sino que se alza majestuoso en medio del paisaje. Hay varios caminos para subir, pero hay que tener en cuenta que se necesita una cierta preparación física.
Camino de ronda de Calella a Sant Pol de Mar
Es uno de los caminos de ronda más bonitos de la provincia por sus vistas privilegiadas del mar. Antiguamente lo usaban pescadores, contrabandistas y centinelas. Especialmente interesante es el Centro de Interpretación del Faro, ya que la antigua vivienda de los fareros se ha reconvertido en un museo en el que se explica de una manera muy divulgativa cómo funcionan estas construcciones fundamentales para los navegantes.
Gorg Negre y Gorg del Salt
Motivo de leyendas y poemas, el Gorg (hoya) Negre, en el término de Gualba, es uno de los lugares más mágicos del Montseny. Para llegar hay que hacer una buena caminata, que sin embargo hará más placentero el baño final. Lejos y camino de Pirineos está el Gorg del Salt, en Borredà. En este caso, para bañarse en su poza de aguas cristalinas podemos llegar en coche y andar luego sólo diez minutos. El salto de agua, de unos veinte metros de altura, forma parte del torrente de Margansol.
Delta del Llobregat
Es uno de los espacios naturales más emblemáticos de Costa Barcelona. Este delta esconde rincones de gran diversidad de flora y fauna. La ruta entre el estanque del Remolar y la playa de Viladecans permite observar fácilmente pájaros acuáticos. Además, el recorrido hasta las ruinas del Cuartel de los Carabineros es ideal para apreciar la vegetación típica de un paisaje de dunas. En la playa del Prat no hay que perderse el mirador del Estanque de la Isla, el más alto del delta.
La Mola
Es la montaña más alta del Parque Natural de Sant Llorenç del Munt y l’Obac, con 1.102 metros, y también el lugar donde se encuentra el monasterio románico de San Lorenzo. Sus riscos le confieren una fisonomía singular. Por el camino se encuentran formaciones espectaculares, como el monolito del Cavall Bernat. Esta excursión es de baja dificultad y más porque con el coche podemos llegar hasta los 800 metros. La Mola comparte protagonismo en el Parque Natural con el Montcau, sólo un poco más bajo.