Un buen momento para Viajar a Hondarribia situada en la desembocadura del río Bidasoa, con un centro histórico medieval y bonitas casas. Esta localidad guipuzcoana sorprende por su trazado y por sus preciosas casas.
Considerada la única villa amurallada de toda Guipúzcoa, Hondarribia también conocida como Fuenterrabia es una localidad marinera situada en la desembocadura del río Bidasoa. Tres entornos resumen su atractivo: el amurallado casco histórico; el barrio de La Marina y sus vistosas casas de pescadores; y el Jaizkibel, la espectacular barrera montañosa que la vigila y la guarda.
CASCO ANTIGUO
El acceso a la zona antigua se puede hacer por la puerta de Santa Maria o la de San Nicolás.
La primera de ellas lleva a la calle Mayor, donde se encuentra el edificio del Ayuntamiento, una imponente construcción barroca que abarca todo el protagonismo de esta calle.
Compitiendo con él está la iglesia de Santa Maria de la Asunción y del Manzano, que llama la atención por su torre del siglo XVIII.
A escasa distancia espera la plaza de Armas, el corazón de la ciudad, plagada de balconadas de colores y terrazas donde tomar el vermú, toda una religión en Hondarribia, y a la que se asoma el tremendo volumen del castillo de Carlos V, ahora convertido en Parador de Turismo.
Un edificio con más de diez siglos a sus espaldas que brinda una de las mejores vistas de la bahía de Txingudi.
Dejando atrás el casco viejo, el paseo continúa hasta desembocar en La Marina, el tradicional barrio de pescadores. Un lugar tremendamente popular, especialmente la concurrida calle San Pedro, repleta de restaurantes, bares y tiendas, donde lo que llama la atención, además de las interminables barras de pinchos, es el colorido de sus casas, con sus típicas balconadas de madera pintadas de colores alegres y adornadas con flores. Una de las estampas más reconocibles de la ciudad.
ESPACIO NATURAL
Más sorpresas esconde Hondarribia en las laderas del monte Jaizkibel, la formidable barrera montañosa al borde del Cantábrico que, además de extraordinarias vistas sobre la costa, reune un poco de todo: el castillo de San Telmo, los fuertes de San Enrique y Guadalupe, el santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, patrona de la ciudad, faros como el de Higer, caseríos y miradores. Pero también abruptos acantilados de gran belleza, calas a la irlandesa y cuevas esculpidas por el viento que se pueden disfrutar desde un barco o en un paseo a pie.
En las laderas del monte Jaizkibel se encuentra el faro de Higer, que sirve de guía para los barcos.
Uno de los barrios más populares de Hondarribia es el de La Marina. Es lugar de pescadores y se caracteriza por el colorido de sus casas
Hondarribia en la única villa amurallada de Guipúzcoa y su centro histórico es de marcado carácter medieval
La localidad guipuzcoana mezcla el verde de las montañas y el azul del mar Cantábrico.
En el centro de la villa hay monumentos fortificados y un entramado de calles dignas de recorrer.
Uno de los accesos a la ciudad vieja es a través de las puertas de Santa Maria y San Nicolás.
GUIA PRÁCTICA
HOTEL SAN NIKOLAS
Situado en el Centro del casco histórico, el alojamiento ofrece unas maravillosas vistas al mar, a la ciudad y a las montañas y los huéspedes podrán disfrutar de un rico desayuno, elaborado allí mismo.
RESTAURANTE JAIZKIBEL
Productos de calidad de la zona, elaborados con técnicas tradicionales y un toque de vanguardia. Eso es lo que viajero encontraré en este acogedor restaurante de la ciudad en el que degustar los platos típicos.
ZUMAIA
A poco más de 50 kilómetros de Hondarribia, donde confluyen los ríos Urola y Narrondo, se encuentra esta bonita localidad. Está rodeada de verdes montañas que descienden hasta el mar en forma de acantilados.
