Cada año, miles de estudiantes de todo el mundo, alrededor de 35.000, eligen Salamanca para aprender, perfeccionar y practicar el idioma español, convirtiendo a la ciudad en uno de los referentes nacionales del turismo idiomático. De hecho, Salamanca es la segunda ciudad con más centros de español acreditados, solo superados por Madrid. En este papel de estudiosa y guardiana de la lengua castellana, Salamanca se ha revelado en las últimas décadas como destino ideal para el aprendizaje del idioma, entendido como expresión vehicular de la manifestación artística y cultural. El atractivo de Salamanca para el estudio del español se caracteriza, junto con la importancia, tradición y prestigio de sus centros de formación, por la identificación de Salamanca como un destino vivo y dinámico, de enorme riqueza patrimonial, histórica y cultural, por sus posibilidades para el ocio, el deporte y el disfrute de la naturaleza y el paisaje.
En 2017 el Ayuntamiento de Salamanca llevó a cabo casi una veintena de acciones de promoción internacional con las que se ha llegado a más de 1.000 docentes y estudiantes. Estando presentes en 13 acciones directas en Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos, Bélgica y Suecia, 11 de ellas dentro del marco del Plan de Acción Exterior para el Español de la Junta de Castilla y León, y también se han realizado 2 acciones de manera independiente, en dos de las universidades mas destacadas de Reino Unido (Durham University y Newcastle University), así como diversos viajes de familiarización. A lo largo de 2018 el consistorio ha realizado nueve acciones promocionales directas dentro del Plan del Español de la Junta de Castilla y Léon, en diversos países: Holanda, Países Bajos, China, Noruega, Italia, Reino Unido. Y con carácter independiente se han realizado tres, dos de ellas en Universidades del Reino Unido y una en la Feria del Español en Taiwan.
La calidad de la enseñanza del español es una de las principales señas de identidad. La labor de las 17 Escuelas de Español de la ciudad, acreditadas por el Instituto Cervantes, y de la Universidad de Salamanca y la Universidad Pontificia, es fundamental en el mantenimiento de la calidad de nuestra enseñanza del español.
El pasado mes de junio, Salamanca acogió la V Edición del Congreso Internacional del Español, que desde hace años viene desarrollándose con el impulso de la Junta de Castilla y León, uno de las citas más destacadas en el sector del turismo idiomático.
Enigmas tallados en piedra
La oficina del español, en la Plaza Mayor, lleva más de 25.000 carnets expedidos desde su creación. Bajo la marca Salamanca Ciudad del Español el ayuntamiento pretende acercar no únicamente el idioma, sino también la cultura y la tradición salmantinas a los estudiantes de español. Para ello, durante el año organiza clases de gastronomía y folclore, lecciones prácticas e interactivas con las que los estudiantes disfrutan y conocen los aspectos tradicionales de la cultura local.
Además, hablar de Salamanca es hacerlo de su Universidad, que este curso cumple ocho siglos de actividad ininterrumpida. El claustro del Edificio de las Escuelas Mayores contiene siete enigmas tallados en piedra, que recogen algunas de las enseñanzas sobre las que se cimenta su historia. El primero de ellos presenta a una mujer sosteniendo una tortuga en una mano y unas alas en la otra con la leyenda «Modera tu velocidad sentándote, y tu lentitud levantándote», en latín.
Astrónomos como Abraham Zacut. Humanistas pioneras como Beatriz Galindo y Lucía de Medrano. Teólogos de la talla de Francisco de Vitoria. Escritores renombrados como Calderón de la Barca y Góngora, y pensadores del calado de Miguel de Unamuno escribieron la historia sobre la piedra dorada de facultades y escuelas. A ellos se les suman los contemporáneos: más de 30.000 hombres y mujeres de 111 nacionalidades que forman parte de la comunidad universitaria salmantina a día de hoy. Y es que Salamanca es la universidad del español. En sus aulas escribió Nebrija la primera gramática de esta lengua, en 1492. Y desde aquí salieron los estatutos con los que se fundarían los primeros estudios americanos. La ciencia en nuestro idioma también ha tenido, y tiene, un lugar destacado aquí, desde los almanaques que trazaron el rumbo de los marinos al Nuevo Mundo a los modernos descubrimientos en todos los ámbitos del conocimiento, que llevan a cabo los científicos de nuestros centros de investigación. Hay un relato permanente que conecta esta universidad con el pasado, y que le permite seguir creciendo y proyectarse hacia lo que viene, trabajando en la vanguardia de los retos a los que se enfrenta la enseñanza superior y la investigación, en el tiempo a que a nosotros nos toca vivir.
Por eso esta es la universidad elegida por miles de estudiantes de toda España y de otros países para aprender. El nombre de Salamanca se asocia a la enseñanza. Así ha sido durante ocho centurias, y también lo es ahora. La base de nuestra actividad es la de generar y transmitir el conocimiento en todos sus ámbitos. La lengua, las humanidades, pero también las ciencias sociales, ciencias de la vida, las biosanitarias y las ingenierías. La Universidad salmantina cuenta hoy con campus en Salamanca, Béjar, Ávila y Zamora. Entre todos agrupan 26 facultades y escuelas que ofertan 65 grados, 71 másteres y 40 programas de doctorado, a los que hay que sumar más de un centenar de títulos propios.