También conocida como Vilnius, la capital de Lituania es un lugar en el que pocos reparan para organizar una escapada, más por desconocimiento que por falta de motivos, a que esperas, descubre Vilna.
Vilna, la capital de Lituania, es considerada una de las ciudades más bellas del Báltico y razones no le faltan’ para serlo. Su entramado de callejuelas del centro histórico forma el casco antiguo barroco más grande del este de Europa y fue reconocido Patrimonio de la Unesco en el año 1994.
La cultura es otro de sus encantos, ya que está en permanente ebullición en la ciudad gracias a su mentalidad abierta y su espíritu de tolerancia, algo que la ha caracterizado durante siglos.
LUGARES INOLVIDABLES – DESCUBRE VILNA
Vilna es una ciudad relativamente pequeña y un buen punto de partida para conocerla es la plaza de la Catedral, que ejerce como punto neurálgico de la ciudad y donde se encuentra, como su propio nombre indica, la catedral de San Estanislao y San Vladislav, custodiada por la torre de la Campana. Ambas edificaciones forman la estampa más fotografiada de la ciudad.

Justo detrás se encuentran el bello palacio de los Grandes Duques de Lituania y la estatua del gran duque Gediminas, considerado el fundador de Vilna. Subir hasta la colina donde están estos dos monumentos es una experiencia única.

Desde ese punto se puede contemplar gran parte del casco antiguo, protegido por un frondoso bosque, y también la zona más nueva de la ciudad, un barrio moderno con rascacielos.

Para bajar de esa colina, la mejor forma de hacerlo es en el funicular que finaliza en el Museo Nacional de Lituania, edificio custodiado por el monumento a Mindaugas, el primer gran duque de Lituania.

VISITAS OBLIGADAS AL VIAJAR A VILNA
Otro lugar que no se puede pasar por alto es la Universidad, un maravilloso conjunto arquitectónico en el que predomina el estilo barroco. Es la más antigua del este de Europa la crearon en 1579 los jesuitas y está formada por un conjunto de edificios concentrados en torno a diversos patios, todos de color blanco, entre los que destacan el de la iglesia de San Juan Bautista y el que acoge la Biblioteca.

Muy cerca de la Universidad está el Palacio Presidencial, un edificio clásico que a lo largo de los siglos fue la residencia oficial de los obispos de la ciudad y bajo el Imperio soviético, la casa del gobernador general de Lituania,

Y antes de abandonar Vilna es necesario visitar la iglesia gótica de Santa Ana, que fue construida con más de 33 tipos diferentes de ladrillos. Se cuenta que el templo sedujo a Napoleón, pero lo que si esté confirmado es que sirvió de refugio para las tropas francesas.

La iglesia de la Ascensión del SEMI( y el Corazón de Jesús es una de las más espectaculares del centro de Vilna
GUÍA PRÁCTICA DE VILNA
NOVOTEL VILNIUS CENTRE
Este hotel de cuatro estrellas está situado en Gedimino Prospektas, la calle principal de Vilna. Además de un centro de fitness posee también sauna, baño turco de vapor y un excepcional restaurante.
RESTAURANTE SENOJI TROBELE
Aunque no está situado en el centro de la ciudad, este establecimiento es uno de los mejores lugares para degustar la típica comida Lituana en un ambiente muy agradable.
QUE VISITAR CERCA DE VILNA
República de Uzupis
Se trata de un pequeño barrio de Vilna que tiene su propia constitución y su presidente y en él residen artistas y bohemios que lo han adaptado a su gusto, con edificios de lo más singulares.
