El Principado de MÓNACO es el segundo país más pequeño del mundo después de la Ciudad del Vaticano y, aunque es sinónimo de ‘glamour’, hay mucho más que ver en esta joya mediterránea.
Menos de dos kilómetros de superficie y tan solo 30.000 habitantes.

Lugares para visitar en Mónaco
Desde tiempos inmemoriales está considerado como el enclave del lujo y el ‘glamour’ y es sinónimo de excesos y derroches. Impresionantes yates amarrados en el puerto y coches de alta gama que recorren sus calles son las señas de identidad de una población acaudalada. Pero Mónaco es mucho más. Es un balcón al Mediterráneo.


LOS EMBLEMAS DE MÓNACO
El corazón del país es Mónaco-Ville, el casco antiguo, repleto de pequeñas callejuelas y vías monumentales y bien cuidadas que, una vez al año, se convierten en el circuito urbano de Fórmula 1 donde se disputa el Gran Premio de Mónaco, uno de los más antiguos y prestigiosos de todo el mundo.

En ese pequeño reducto de calles se encuentran los edificios más emblemáticos del estado. Uno de ellos es el Palacio del Príncipe de Mónaco, el lugar donde han vivido los Grimaldi desde hace 700 años. Se trata, pues, de un reducto monárquico entre las repúblicas que rodean a la ciudad.

Vacaciones en Mónaco
El edifico rebosa belleza y sobriedad y guarda los secretos del pasado a través del patrimonio histórico, como el Salón del trono, testigo de celebraciones tan importantes como la boda del príncipe Alberto con Charlene Wittstock o la de sus padres, Rainiero y la emblemática Grace Kelly.

Compitiendo en fama con este edificio se encuentra el Casino de Montecarlo, un lugar bello por dentro y por fuera y la meca del juego. Fue diseñado por Charles Garnier, el mismo que firmó la obra de la Ópera de París, y está rodeado de jardines. En los alrededores se encuentran siempre aparcados coches de alta gama con los que los turistas no dudan en fotografiarse.

Entre sus curiosidades, cabe destacar que ha sido escenario de muchas películas y que los monegascos tienen prohibida la entrada al casino para jugar, una ley que dicto Carlos III en 1860 para que los ciudadanos no se endeudaran.

MÁS LUGARES DE MÓNACO
Entre las edificaciones religiosas hay que citar la Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, construida en 1875 y con una espléndida fachada de estilo neorrománico. Destaca, además, por albergar los sepulcros de los príncipes difuntos de la familia Grimaldi como los de Raniero III y Grace Kelly.

Durante la visita a Mónaco tampoco hay que perderse el Museo Oceanográfico, construido en el flanco de la legendaria Roca, que se erige como referencia internacional para dar a conocer y enseñar a querer y proteger los océanos, o el jardín japonés, un espacio verde de siete hectáreas que traslada por unos instantes al país del sol naciente e inspira para meditar.

El Palacio del Príncipe de Mónaco es el lugar donde han vivido los Grimaldi durante 700 años. Aunque sobrio, el edificio es de gran belleza y guarda los secretos del pasado histórico del Principado, como los de la boda de Rainiero con la popular Grace Kelly.

La Catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción guarda desde 1875 los sepulcros de la familia real. Algo más nuevo es el jardín japonés.

Puerto Cap D’Ail es uno de los puertos deportivos con los que cuenta Mónaco, en la frontera con Francia.

GUÍA PRÁCTICA EN MÓNACO
Situado en el corazón del Principado de Mónaco, este alojamiento ofrece a sus clientes piscina al aire libre, gimnasio y sauna.
Comida francesa, lujo y calidad. Eso es lo que ofrece este bonito restaurante monegasco, donde comer se convierte en un verdadero placen
¿QUÉ PUEDE VISITAR CERCA DE MÓNACO?
Saint-Tropez
Situada en Francia, la ciudad es otro de los enclaves de lujo de la Costa Azul. En todo este tiempo, Saint Tropez no ha perdido un ápice de sus encantos y sigue haciendo soñar a todos los turistas que se acercan hasta allí en busca de relax y glamour.

